Recomendación: Cañas
Vaya por delante que la caña de cerveza no se sirve, se tira. Y tirarla bien importa tanto como la calidad de este apreciado y muy consumido oro líquido. Un verdadero arte que algunos bares y restaurantes dominan con maestría y en el que todo cuenta, desde la inclinación del vaso o de la jarra hasta la elección de las copas adecuadas en las que, por supuesto, no hay que servir otras bebidas.
El resultado: una cerveza fría y con sus dos centímetros de cremosa y compacta espuma, sin fisuras ni pompas. Estas son nuestras cinco propuestas para disfrutar de las mejores cervezas de grifo. La marca escalonada que la espuma deja en el interior del vaso a cada trago es la prueba irrebatible de que estamos ante una caña tirada con dedicación y esmero.